Entradas

Mostrando las entradas de 2013

Nunca antes me habías saludado con un beso en la boca

Después de decirme que no te gustaban los gatos Mojaste tus dedos entre mis piernas reconociste un sabor distante más tarde me pedirías que te la chupara en el asiento de atrás nos jactaríamos resignados de que las conversaciones pueden ser eternas y que podés reinventar la palabra infidelidad Encima de las mesas sonaba una horrible canción que decía te amo y acordamos ignorarla haciendo un pacto de incomodidad sin detener la trayectoria de un beso. Si aun tuvieras el pelo verde, tal vez me dejarías usar tu rifle Y tendríamos un mauser que mata el pasado Un perro que contrarreste esas ocho patas felinas Y otra juventud que nos ayude a decidir o por lo menos a esperar

Un día triste

Miserable me siento opaca como una copia mal hecha o una foto desteñida. El mundo no me habla a pesar de la ternura de las niñitas que tocan el piano a manotazos o juegan a ser fantasmas terribles. Tengo la impresión de las actrices que fueron famosas y ya nadie recuerda en sus abluciones clandestinas. Esta tristeza de hoy no es igual a cualquiera, cala en lugares inhabitados y clausurados es honda y abnegada, va más allá de cualquier nosotros de él y de vos. Hoy me siento una sombra, un cuerpo de llanto que intenta escaparse de mi cuerpo-piel un malestar un beso de Judas en los labios un nudo de palabras atragantadas o una sonrisa torcida atascada como una pelota de navajas bajando por la garganta cada trago de miedo y de final